A LA NEGRA NO LE TEMBLABA LA VOZ!


Ojo, con este discurso , como el de otros lideres hay que reproducirlo, ella realmente dijo muchas cosas , ojala cada uno tome lo que le corrresponde. El video está poderoso y la fuerza de la palabra de esta mujer son otra cosa , como la fuerza de los que resucitan, porque el establecimiento los mata, es y seguira siendo una convencidas de la causa. ¡ En su memoria, compromiso con las luchas del pueblo afrocolombiano!.

un abrazo
«En el año internacional de los y las afrodescendientes»

Afrocolombianamente


Pbro. Emigdio Cuesta Pino, svd
Secretario Ejecutivo, CNOA
Calle 67 N. 14A-26 Bogotá D.C.
Tels:  57 1 3455520 / 3118093869 / 3174365895
ÁREA DE COMUNICACIONES / ASOCIACIÓN CAMPESINA DE ANTIOQUIA

Observatorio Audiovisual e Investigativo sobre Procesos Comunitarios y de Resistencia
PRODUCCIONES EL RETORNO / 2011 – http://comunicaciones.acantioquia.org/

>> DIFUNDE Y DISCUTE ESTA INFORMACIÓN >>


Durante la Despedida a Ana Fabricia Córdoba / Jueves 9 de junio de 2011, Cementerio San Pedro, Medellín.

Fotográfias en: www.documentalamarillo.co.cc – GALERIA

ASÍ HABLABA ANA FABRICIA – http://www.youtube.com/watch?v=aNQ16rpOhAk


Retrato del barrio donde vivió la líder asesinada
La Cruz de Ana Fabricia

Hace 60 años nació en Medellín un barrio que hoy es líder de la movilización popular por la defensa de los derechos humanos. Asentamiento de desplazados, de sobrevivientes de la guerra.

Barrio La Cruz

Ana Fabricia Córdoba siempre tuvo palabras fuertes y directas para hablar de lo cerca que sentía la muerte, que ya se había llevado a su hijo hace once meses y que vino por ella el martes, a manos de un sicario que le disparó en un bus de Medellín.

Recorrió las calles de la capital antioqueña abanderada de las necesidades de los desplazados. Su delgada figura y el rostro de ceño duro se enfrentaron una y otra vez a los micrófonos para enjuiciar con sus palabras a los agentes del Estado y condenarlos como responsables de la muerte de su hijo. También lo sostuvo hace un año ante las cámaras del documental ‘Desconexión en Movimiento’ que se rodó  en su barrio, una y otra vez responsabilizó a las multinacionales por su desplazamiento efectuado por paramilitares, expuso las necesidades de los desplazados, la carencia de servicios públicos y las ganas de recuperar su tierra.

A La Negra no le temblaba la voz, por eso siempre fue blanco de amenazas, por eso fue capaz de decir en el último encuentro de derechos humanos al que asistió en abril: “Me van a matar y no han hecho nada”.

Llegó a Medellín en 2001 huyendo del Urabá antioqueño, donde fue asesinado su primer esposo. Se asentó en La Cruz. Una ladera ubicada en la Comuna 3, al nororiente de Medellín, donde las invasiones de desplazados se han tragado la punta de la montaña y el aire que se respira es distinto pues parece que se estuviera más cerca del cielo que de la tierra. Desde arriba la capital se contempla inmensa. Con los años las montañas, cada vez menos verdes, se han vestido de tablas y ladrillo, de construcciones informales que terminaron convertidas en barrios.

La Cruz, como la mayoría de asentamientos periféricos de Medellín, parece una Antioquia chiquita. Si se hiciera un censo, quizás podrían encontrarse representantes de la mayoría de municipios que en el departamento fueron víctimas de paramilitares, guerrilla y ejército, como el Urabá, San Carlos, San Rafael, Caucasia, Segovia o El Aro. Es un barrio de sobrevivientes, de relatos de noches en que salieron corriendo de la finca, del marrano olvidado, de la tierra arrebatada, de los muertos que bajaron por los ríos, de los que se quedaron en el camino y de la difícil vida en una Medellín abrumadora. Esta carga de injusticia que reúne La Cruz motivó a que su comunidad de desplazados, liderada por mujeres, se convirtiera en una de las más activas en la movilización frente a la defensa de derechos humanos en la ciudad.

Hace tres años, Ana Fabricia creó la organización de víctimas del conflicto armado Líderes Adelante por un Tejido Humano de Paz (Latepaz) y además hacía parte de la Mesa Interbarrial de Desconectados —que lucha por que los servicios públicos les sean garantizados— y de la Organización de Mujeres Aventureras, gestoras en derechos,  creada por otra importante líder del barrio y conformado por unas 20 mujeres desplazadas y cabezas de familia, que adelantan proyectos comunitarios productivos y se movilizan contra los atropellos, a los que aseguran han sido sometidas por todos los actores armados, incluidos los oficiales. Desde Medellín, organizaciones como la Corporación Jurídica Libertad, la Red Juvenil y el Instituto Popular para la Capacitación acompañan a la comunidad en procesos de capacitación frente a la defensa de sus derechos.

La situación de servicios públicos es preocupante. Algunas mujeres de La Cruz cocinan con leña, pues al barrio de terrenos inestables aún no llegan, ni llegarán pronto, las redes de gas o de energía legalizadas. Empresas Públicas de Medellín ha llevado a algunos sectores sistemas ‘provisionales’ llamados pilas públicas, desde donde se les entrega energía a varias casas a través de un contador comunitario y entre familias se dividen la cuenta mensual. También, hace tres años se implementó el sistema de energía prepago, en el que las personas pueden comprar una tarjeta de mínimo 2 mil pesos de energía y activarla en casa. Pero los habitantes se quejan de las elevadas tarifas cotizadas y ven en el prepago una forma de privatizar un derecho, entonces los servicios terminan cortados por falta de pago y los ranchos a oscuras. También escasean el agua potable y el alcantarillado, los niños juegan cerca de las aguas negras y en algunos sectores el vital líquido sólo llega por momentos. Por ello, todos los días las mujeres se ven obligadas a recoger en la madrugada el agua para el consumo diario.

Así es La Cruz, un barrio donde es normal encontrar hombres de sombrero, machete y poncho, cultivos improvisados en los solares de los ranchos, de donde se comen zanahorias, lechugas y cilantro, donde el invierno y sus deslizamientos han dejado varias casas destrozadas y donde gran parte de sus habitantes preferirían simplemente regresar a la finca de donde los sacaron, regresar al marrano, las vacas y al trabajo de la tierra.

ONU y Francia piden castigo para asesinos

Mientras las autoridades ofrecen $150 millones de recompensa para quien entregue información que permita dar con los responsables del asesinato de la líder comunitaria Ana Fabricia Córdoba, las reacciones de la comunidad internacional ya comienzan a sentirse.

El gobierno francés condenó el crimen  y pidió que sus autores sean llevados ante la justicia. “Francia se une al luto de los allegados de Ana Fabricia Córdoba y expresa su solidaridad con todas las víctimas de la violencia en Colombia”, señaló el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores francés, Bernard Valero.

Por su parte, el representante de la ONU en Colombia, Christian Salazar, pidió al Gobierno adoptar medidas para reforzar la seguridad de los líderes de las víctimas en el país. Durante la presentación en Sincelejo de un informe sobre derechos humanos en Colombia, Salazar lamentó el asesinato de Córdoba,  que calificó como “triste y preocupante” .

Angélica María Cuevas G. | Elespectador.com

“Me van a matar y no han hecho nada”. Palabras de Ana Fabricia Córdoba.

ÁREA DE COMUNICACIONES / ASOCIACIÓN CAMPESINA DE ANTIOQUIA
Observatorio Audiovisual e Investigativo sobre Procesos Comunitarios y de Resistencia
PRODUCCIONES EL RETORNO / 2011 – http://comunicaciones.acantioquia.org/


>> DIFUNDE Y DISCUTE ESTA INFORMACIÓN >>

ENCUENTRO CON CATEQUISTAS, SERVIDORES, JÓVENES Y MIEMBROS DE LAS CEBS.


CHARLA DE JOSÉ COMBLIN, DOMINGO 24 DE AGOSTO DE 2008. AUDITORIO JUAN PABLO II.

El conocimiento de Jesús tiene dos fuentes: mirar al necesitado y leer el Evangelio, se puede leer el Evangelio pero como quien lee un libro de historia, pero de esta manera no sirve para explicar lo que está sucediendo ahora. Cuando nos encontramos con Jesús en el otro lo miramos y lo reconocemos gracias al Evangelio: prestar atención y actuar como él actuó. Leer la Biblia sin referirse a la situación actual es inútil, es papel y tinta. ¿Por qué es palabra de Dios? Cuando nos encontramos con el hermano necesitado las palabras se hacen vida y se hace palabra de Dios. Ahí Jesús me dice "mira esta persona, esta necesidad, yo hice esto". Nos habla todos los días pero nuestros oídos están cerrados. El Evangelio nos explica lo que pasa en nuestra vida. La Biblia se estudia en la vida, cuando nos encontramos en la misma situación que Jesús encontró. Si hemos escuchado la palabra del Evangelio sabremos lo que hay que hacer en una situación concreta. La teología puede crear la ilusión de que uno puede hacerse cristiano y discípulo de Jesús. Un pagano, un ateo también puede leer y estudiar la Biblia.
¿Cuántos católicos hay que leen los evangelios o la Biblia? Hay que aprender desde niños, hay que leer la Biblia todos los días, hay que hacer de esa lectura una costumbre. Por lo general son pocas las familias en donde los niños leen la Biblia. Entonces, ¿cómo van a conocer a Jesús? Es más importante que los sacramentos, va a misa y no lee la Biblia, eso no sirve de nada. El leer la Biblia y reconocer a Jesús en los necesitados debe aprenderse desde niños. Si no aprenden temprano es mucho más difícil después; los niños aprenden con mucha facilidad. A los niños debe enseñárseles a servir, pues a los niños siempre se les enseña a mandar, ellos son los que aprenden el poder, no el servicio. Por eso hay tanta diferencia entre hombres y mujeres. La catequesis es la misma para todos, tiene que haber diversidad. Los niños necesitan descubrir al otro y ver en qué pueden servir. Por eso la catequesis es tan importante, no sólo es doctrina sino que también tiene que ser una práctica de servicio.
La figura de Jesús. Nació pobre, sin poder, no pudo obligar a otro, fue siempre víctima de los demás. Vino pobre para dar un mensaje a los pobres. ¿Qué es un pobre según Jesucristo? Los que han sido hechos pobres, no por naturaleza. La base de la diferencia entre ricos y pobres es que de por medio hay un robo. La mitad de la tierra de Galilea pertenecía a Herodes, la mayoría de la población trabajaba para él. En nuestros días los indígenas son pobres porque les quitaron sus tierras. La pobreza es la consecuencia de la dominación, del robo, del poder de algunos.
Según los ricos, los pobres son pobres porque beben, porque son flojos, porque quieren. Hay pobres porque son víctimas de otros, porque hay injusticia. Jesús viene a cambiar la injusticia, se mete entre las víctimas y quiere cambiar las cosas. Ese es el mensaje de Jesús que es tan difícil. El hecho de que Jesús se haya hecho pobre ya es una denuncia. Además de pagar impuestos, tienen que hacer donaciones al templo para los sacrificios. Se benefician las familias de los sacerdotes, por eso Jesucristo entró en conflicto con ellos porque eran ladrones, explotadores de los pobres. Dios hizo todo para todos, no para unos pocos. En América Latina la palabra justicia suscita una reacción en las familias que han robado. San Juan Crisóstomo, en el siglo IV, decía que detrás de cada fortuna hay un robo.
2
Jesús se hizo pobre, sin poder, pero con un mensaje de liberación: que se va a suprimir el pecado original: algunos han robado y matado a otros. Hay dos tipos de personas los que dominan y lo que son dominados. Este es el pecado que Jesús quiere suprimir. Ese es el pecado desde el inicio, este es el pecado original. Medellín habla de la violencia institucionalizada, toda la estructura social es de pecado. Jesús no sólo se hizo pobre, sino que permaneció pobre porque no quiso conquistar ningún poder (tentaciones de Lucas). La justicia no se enseña en la catequesis a los niños, no saben lo que pasa, no saben por qué hay ricos y pobres. Si eso no se enseña ni siquiera en las homilías, la gente no sabe, hay mucho silencio. Los más pobres nacen y crecen con un sentimiento de inferioridad y no saben por qué. Y los niños que no son pobres no saben tampoco nada sobre esa situación. Durante siglos se presentó a Jesucristo como emperador, luego como un rey con corona en la cabeza. Eso causaba miedo. Si estaba con los reyes, ¿dónde quedaban entonces los pobres? Luego se presentó la imagen inofensiva del sagrado corazón de Jesús. No habla de justicia, sino de compasión. Pero Jesús vino a hablar de justicia, de la superación de las desigualdades. Para Jesús no todos los hombres son iguales, el pecado los hace diferentes: unos que mandan y otros que son subordinados. No podemos tratar a todos como iguales. Los pobres son los privilegiados de Jesús. Hay que reexaminar los programas de catequesis. Hay que tener mucho cuidado con las imágenes que tenemos de Jesús, de otra manera no le dicen nada a la gente, no se sienten interpretados, no invitan a la acción. Cuando se encuentra con un indígena pobre, ¿qué pasa? ¿Por qué es pobre? No se puede tratar a todos como iguales. "Felices los pobres", "¡hay! de ustedes los ricos”. Jesús nos trató a todos como iguales. Esto es fundamental en el Evangelio. En el cántico de María –el Magnificat- se hace esta diferenciación.
El mensaje de Jesús es el reino de Dios (de los cielos). En Israel, el rey, es el defensor y liberador de los pobres. Pero ahora el sentido ha cambiado. En la actualidad las cosas han cambiado. La función de Dios no es gobernar, no es enseñar ni imponer leyes, es defender a los pobres. El reino de Dios o el reinado de Dios significa que los pobres van a tener un padre y un defensor. Las cosas van a cambiar, será una sociedad nueva, una sociedad de iguales, de hermanos. Muros, rejas, candados y puertas nos dicen que estamos muy lejos del reino de Dios. El que manda no es Dios, hay miedo, hay temor, represión.
En el reino de Dios la autoridad es para servir, no para imponerse. El reino de Dios es una sociedad nueva. Por eso el mensaje de Jesús despertó una esperanza en los oprimidos, en los desesperados. Hoy serían los excluidos, los que no tienen lugar en la sociedad: adultos mayores que son considerados como inútiles; ¿por qué están excluidos? Hay plata para los ricos, pero para los pobres no hay. Se han abandonado las escuelas populares, a las clases dominantes no les interesa. Con el tipo de enseñanza actual es muy difícil avanzar en la construcción del reino de Dios. Los pobres no tienen esperanza y se han fortaleciendo las condiciones actuales de marginación y exclusión. En la historia de la humanidad han cambiado muchas cosas pero no precisamente por la acción de la Iglesia. Iglesias ricas ¿quién los pagó? ¿Quien trabajó ahí? ¿Quién construyó la basílica de San Pedro en Roma? Los negros esclavos. Es un monumento de la vergüenza, de la esclavitud. Vendieron indulgencias para comprar los materiales de construcción ¿Dios necesita catedrales, iglesias, basílicas? No, Dios está en otra parte. Eso no es el reino de Dios, está donde se libera a los oprimidos, donde se construyen escuelas para niños pobres. Por eso Jesús se hizo pobre, porque sabía que sólo los pobres quieren un mundo diferente. Pero hay que despertarlos para que se animen, para
3
que construyan un mundo distinto con la fuerza de Dios en el corazón de la gente oprimida.
Mantener viva la esperanza y aprovechar las oportunidades para actuar. Jesús entra en conflicto con todas las autoridades incluidas las religiosas del templo, porque hacían negocio con Dios. Inventan cosas para oprimir al pueblo, para servirse de él. Muchas veces hay señales de la Iglesia (catedrales, basílicas) que apartan del Evangelio.
La construcción de los edificios religiosos es para hacer una selección. Hay edificios para los ricos y para los pobres. Ahora hay una cantidad de grupos que se reúnen en las casas. Los domingos hay más gente es en esas iglesias populares, que en las grandes iglesias y catedrales. La Iglesia Católica ha abandonado a los pobres. Por eso monseñor Proaño se resistió a construir una catedral. Jesús vino a anunciar el reino de Dios no el de los sacerdotes y de los maestros de la ley. Jesús no vino a asumir la ley, vino a anunciar que la ley se acabó, que las personas son conducidas por el espíritu, es el reino de la fraternidad y de la igualdad. En las comunidades pequeñas se ven las necesidades, se descubren y la gente se ayuda.
La oración de Jesús. Muchos líderes terminaron confundidos, muchos terminaron en el sistema neoliberal, otros ya no hacen nada. ¿Qué pasó? Falta de interioridad, de conversión personal. Se puede distinguir entre una persona que tiene oración de la que no la tiene. ¿En qué consiste la oración cristiana? No en hablar sino en escuchar lo que Dios y Jesús nos dicen. Quien reconoce a Jesús presente en el pobre, en el necesitado es quien ha escuchado la palabra de Dios. Esto se hace en silencio. Ahora hay mucho ruido y el silencio se hace mucho más difícil. Hay que escuchar con atención. Dios sólo habla en el silencio. ¿Qué dice? Hay que abrir los ojos y los oídos. El canto no es oración, nos prepara para el recogimiento, para el silencio, para hacer la oración. Dios sólo habla en el silencio. A los niños se les debe enseñar a orar desde el inicio, a escuchar a Dios haciendo silencio.
Si decimos que Dios no nos habla, es muy grave, hacemos tanto ruido que no escuchamos a Dios. Toda actividad al servicio del reino necesita alimentarse, fortalecerse y esto sólo es posible con la oración. Jesús se retiraba en la noche para orar. ¿Qué hacía? Recordaba a todas las personas que conoció, lo que dijo, la manera como actuó y se preguntaba si hizo lo que Dios quería, si hizo lo que era preciso para el reino.
Los jóvenes con lo poco que tienen ¿cómo logran vivir? Tienen que aprender en otro lugar lo que no aprendieron en su casa. Se ha destruido su personalidad absorbidos dentro de las imágenes y de los ruidos. El discípulo de Jesús es el que aprende a escuchar y esto hay que hacerlo desde muy temprano. Jesús enseñó una oración muy significativa a los apóstoles que le pidieron que les enseñara a orar: el Padrenuestro; nos dice que hay que ser la voluntad de Dios y no la nuestra. Muchas veces nuestras oraciones son una palabrería sin ningún fundamento.
Misioneros. Encargados de llevar el Evangelio a sus hermanos, ese Evangelio que han recibido como buena noticia. ¿Cómo un cristiano es un misionero? por la alegría, lo que va a llamar la atención a los otros es la alegría, porque su vida ha sido transformada, porque Jesucristo le ha dado alegría y ha transformado la vida a esa persona. El catecismo no hace feliz a nadie; la alegría, en cambio, llama a las personas porque todo mundo quiere ser feliz y se pregunta ¿por qué esta persona es feliz? Ese es el sentido de las Bienaventuranzas; Jesús llama felices a los pobres. No hay que invitar
4
a la gente para que venga a misa, hay que acercarse a las personas, tratar de saber qué es lo que le permite vivir a pesar de todas las adversidades, que es lo que le ayuda a una persona a vivir. Antes de cualquier sacramento tiene que haber el anuncio del Evangelio. No hay que apurarse, cuando se comienza con las obligaciones no hay futuro. En la actualidad hay mucho rechazo a la dominación clerical. La misión no puede ser una imposición moral, ni mental ni institucional. Jesús no impuso ninguna condición ni ninguna doctrina. El misionero debe desprenderse de cualquier autoridad para llegar a la gente. Para el sacerdote es más difícil ser un siervo, un servidor. El misionero ofrece, no impone.

Remitido al e-mail

La ordenación de las mujeres – un desafío y una oportunidad


En la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe, Patrona de Latinoamérica (12 de Diciembre de
2010) fue ordenada al presbiterado la primera mujer católica latinoamericana.
La ordenación se celebró con gran discreción. Según el Código de Derecho Canónico adoptado
bajo el pontificado de Juan Pablo II en 1983 y que rige la vida institucional de la Iglesia católica,
“Solo el varón bautizado recibe válidamente la sagrada ordenación” (can 1024). Hubo
imposición de manos en sucesión apostólica, por lo cual la ordenación es válida, pero se trata
de una ordenación que viola el Derecho canónico por tratarse de una mujer. Pero es ilícita
hasta el día en que con un plumazo Benedicto XVI o uno de sus sucesores supriman este canon
1024.
Como lo han demostrado expertos y expertas en la materia, este canon no tiene justificación
otra que la de una tradición de pensamiento mágico con la que se inmuniza contra la
modernización la institución clerical que pretende gobernar a la feligresía católica. Pero cada
día es mayor el número de feligreses que en sus relaciones con Dios y lo divino dejan de
recurrir al servicio mediador de un clero exclusivamente masculino, pretendidamente célibe y
además demasiado escaso como para poder recibir atención personalizada en momentos de
alguna crisis existencial.
Y es precisamente en esos momentos en que se requiere la presencia de una persona
mediadora, de un espejo humano que refleje la misericordia divina, de una compañía frente a
los desafíos existenciales. Es en esos momentos que se necesita experimentar que a imagen y
semejanza de Dios trinitario somos comunidad. Y es en esos momentos en que la presencia de
la presbítera, la mujer (junto con el varón) investida por la comunidad de quienes creen en el
Dios Padre y Madre de Jesucristo cobra relevancia para recordar al individuo en crisis que Dios
no abandona, aunque el sufrimiento parezca ocultar su presencia.
La ordenación de las mujeres para un ministerio renovado dentro de la Iglesia representa un
enorme desafío para la institución y suscita un temor inmenso entre los guardianes de ese
aparato que pretende administrar lo sagrado como si este fuera objeto burocrático. Ellas
buscan atender a las personas, no al aparato. Y con su ejemplo buscan demostrar que es
posible renovar el ministerio y recuperar todo el cuerpo de ministros ordenados para el
servicio de las personas en vez de seguir instrumentalizándolos para acrecentar el poderío
mundano de la corporación eclesiástica.
Pero los actuales guardianes de la institución confunden a esta con el sacramento que
representa la Iglesia – Cuerpo místico de Cristo y Pueblo de Dios. Para los actuales guardianes
de la institución lo que hay que proteger antes que todo es el aparato. El reciente escándalo de
pederastia lo ha vuelto a evidenciar: Dentro de un aparato institucional que exige la
continencia sexual absoluta de su personal como el criterio sine qua non para desempeñar sus
funciones institucionales se ha ocultado sistemáticamente la practica endémica del abuso
sexual de menores. Así se buscaba proteger la “imagen de marca” del aparato frente a las
demás instituciones sociales. Al divulgarse el escándalo y alcanzar proporciones de diplomaciainternacional el Vaticano promulgó una declaración oficial sobre los “pecados gravísimos”
condenando estos gravísimas ofensas cometidas por individuos contra otras personas. A su vez
fue listado como “pecado gravísimo” la ordenación de la mujer, que contrariamente a la
pederastia no le hace daño a ninguna persona. Pero contrariamente a la pederastia, esta fue
sancionada con el castigo máximo del cual dispone el aparato institucional: la excomunión.
Esto evidencia que el pecado contra un ser humano se considera menos grave que el “pecado”
contra el aparato institucional. Es que este “pecado” pone en peligro a la institución y a su
status quo: su estructura exclusivamente masculina, pretendidamente célibe, jerárquica,
centralista, absolutista y clericalizada. Este “pecado” pone en tela de juicio la pretendida
sacralidad del aparato.
El temor suscita reacciones que pueden ser peligrosas. Hay dentro del catolicismo grupos que
tienen por objetivo el mantenimiento a todo precio del aparato institucional y el aumento de
su poderío mundano (político y económico). Y hay otros poderes mundanos (políticos y
económicos) que se benefician con la existencia de una institución eclesial machista y
poderosa. En países de cultura machista, con instituciones democráticas deficientes, donde
existe el feminicidio y se resuelven muchas cosas por la violencia, es mejor tener cierta
precaución.
Pero es en estos contextos donde la simple supresión del canon 1024 representaría un
mensaje particularmente necesario del catolicismo hacia la sociedad civil. Mientras la cúpula
de la Iglesia institucional lo comprenda las mujeres que son ordenadas (violando una ley
injusta) dan testimonio de que no hay que esperar para obrar por un mundo mas justo.
¡Apoyémoslas!

Elfriede Harth
Católicas por el Derecho a Decidir de España

FUENTE:http://www.donesesglesia.cat/documentos/ordenacion_mujeres_hart.pdf

SABERES INDÍGENAS NUEVOS «ACTIVOS FINANCIERON»….


Naturaleza genes y saberes indígenas son los nuevos “activos financieros” del capitalismo verde

Lunes 13 de junio de 2011 por CEPRID SENA-Fobomade CEPRID La Décima Conferencia de partes del Convenio de Biodiversidad Biológica (COP10) celebrada a fines de octubre de 2010 en Nagoya, Japón,…

Para seguir leyendo haz clic aquí

Fuente: Elpolvorin.com

 

 

Ideas en torno a una Cristologia inclusiva feminista


Hablar de Cristología inclusiva feminista es ya pensar que existen Cristologías que
excluyen y excluyen muí particularmente a las mujeres. Esta afirmación pertenece a un
grupo limitado de mujeres feministas que se han dado cuenta de la complicidad de los
sistemas religiosos con los procesos de opresión cultural de las mujeres. La mayoría de
las mujeres cristianas vive un cristianismo que se podría llamar pré-critico. En otras
palabras no llegaron a percibir las implicaciones de sus creencias religiosas con las
diferentes opresiones sociales, políticas y económicas ni con la movilidad y pluralidad
social.
Esto nos permite reafirmar que no existe un sujeto religioso homogéneo y por eso
nuestra labor intelectual presente se direcciona especialmente aunque no de forma
exclusiva a las mujeres que están en un proceso de búsqueda más allá de las formas
religiosas patriarcales.
Nuestra construcción cristológica se afirma a partir de tres consideraciones:
. Busca ser expresión de los valores sostienen la vida
. Quiere superar el orden patriarcal establecido en el cristianismo
. Revalora la corporeidad humana y en particular los cuerpos femeninos
Por eso somos invitadas a pensar el cristianismo no más a partir de figuras masculinas
simbólicas e institucionales que tenemos que imitar o que obedecer. Nos incluimos
como participantes y protagonistas de los procesos éticos y libertarios en los cuales
creemos. En esta perspectiva haciendo una retrospectiva histórica de las grandes
religiones y sabidurías que hemos heredado, nos damos cuenta que para la mayoría de
ellas, el punto partida de la constitución de su movimiento y de sus creencias fue el
encuentro con los cuerpos sufrientes, especialmente los cuerpos marginados y
oprimidos. Y a partir de ahí han intentado transformar relaciones y a vivir
enfrentamientos con los poderes establecidos opresores.
Lo mismo podemos decir de las mujeres feministas. Nosotras también nos encontramos
con nuestros cuerpos sufrientes, maltratados y silenciados por las estructuras de poder
patriarcal. Esta consciencia es el inicio del movimiento feminista y este es el inicio de
las teologías feministas. Por eso que en nuestra cristología o sea, en la manera que
entendemos la dimensión salvífica del cristianismo, incluimos a nosotras y no
solamente la valoración de un solo hombre. Ahora somos todas salvadoras y salvadores unas de las otras. En síntesis ya no hablamos de un único Cristo pero si de la dimensión
crística en la cual nos incluimos mujeres y hombres. La dimensión crística es aquella en
que nos sentimos enviados unos para otros de forma que el dolor y la alegría de mi
hermana son también mi dolor y mi alegría. No puedo pasar por la vida sin mirarla, sin
darle la mano, sin acoger sus preguntas y sus intentos de respuesta. Y aquí tengo que
incluir mi lucha en contra las formas religiosas que mantienen el desorden de la
injusticia como orden jerárquico querido por Dios.
Uno de los problemas que también enfrentamos es que en la simbología del amor
cristiano la figura masculina entró como central e fundamental. Nosotras teólogas
feministas buscamos caminos para intentar rescatar y abrir para una simbología
femenina que pueda enfrentarse a los excesos de la cultura patriarcal. Retomamos,
aunque conscientes de las muchas contradicciones en relación a la utilización de la
maternidad por la cultura patriarcal, una reflexión sobre la relación Madre – Hijo/Hija.
La madre tiene que ver con la dimensión originaria femenina de la humanidad capaz de
generar hijas e hijos misericordiosos, preocupados en ayudarse mutuamente. Hay un
rescate del sufrimiento y de la liberación que vivimos a lo largo de la historia de forma a
subrayar el protagonismo fraterno y sororal de la humanidad.
En esta línea abrimos caminos para superar el orden patriarcal vigente. Proponemos
otra comprensión de la tradición no más como repetición verbal de dogmas
cristológicos que se establecieron a lo largo del cristianismo, ni imitación de figuras
ejemplares. Buscamos la tradición de la misericordia que se traduce por la atención a los
eventos del presente, que se afirma en la capacidad de escuchar las preguntas del
cotidiano de la gente. Esto nos ubica en una teología laica o sea no necesariamente
sometida a las instancias clericales de la religión. Los clérigos no pueden más ser
considerados los representantes o los mediadores de las gracias divinas como si
fuéramos niñas esperando los favores de sus maestros. La práctica del amor y de la
justicia en sus diferentes expresiones es prerrogativa de las comunidades cristianas y no
de una élite de dirigentes.
Finalmente nuestra cristología quiere revalorar la materialidad de los cuerpos y
particularmente del cuerpo de las mujeres. Revalorar la materialidad de la vida significa
en teología creer que podemos vivir lo que creemos. En relación a Dios podemos
transformar este sustantivo en un verbo – diosar. O sea, ser capaces de intentar de vivir
lo que pedimos a Dios. Dios con nosotras significa diosar desde nuestros cuerpos. Es por todo eso que la cristología feminista se dibuja desde nuestra experiencia y es a
partir de ella que releemos nuestras herencias religiosas del pasado.
Concluyo invitando a nosotras a seguir nuestra lucha con mucho humor. Los tiempos
actuales lo exigen para que podamos vivir un mínimo de sanidad y para relativizar la
fuerza del opresor. Manifestamos así el rostro oculto de los prepotentes y su miedo de
todas las manifestaciones de la libertad.
Las cristologías feministas nos devuelven la responsabilidad por nuestra historia, una
responsabilidad ubicada en nuestros contextos y posibilidades reales. Nos animan a
amar la diversidad y a no querer imponer nuestras verdades como camino único para
todas las personas.
Ivone Gebara
Teóloga feminista. Brasil
Síntesis de la ponencia impartida en el encuentro de “Mujeres y Teología” en Logroño

Fuente:http://www.donesesglesia.cat/indice.htm

Los primitivos cristianos parecían tener un solo corazón y una sola alma


El descenso del Espíritu Santo y la vida de los primeros cristianos
|||||
 Se reunían diariamente en el templo y escuchaban la palabra de los Apóstoles

  La historia de la Iglesia cristiana comienza con el descenso del Espíritu Santo sobre los Apóstoles. Antes de su Ascensión al cielo, nuestro Señor Jesucristo mandó a sus apóstoles que no se apartasen de Jerusalén hasta ser revestidos de poder supremo desde lo alto. Esperando el cumplimiento de esta promesa del Señor, ellos después de rezar eligieron a Matías como el duodécimo Apóstol en lugar del traidor Judas; eligiendo al suplente de Judas, los Apóstoles condicionaron que el mismo debía ser testigo de la obra y Resurrección de Cristo.

En el quincuagésimo día después de la Pascua, en la festividad judía de Pentecostés, que coincidió con un domingo, los apóstoles se reunieron para rezar. Asimismo se encontraba presente junto a ellos la Madre de Dios y algunos otros cristianos, en total 120 personas.

 

EL ESPÍRITU SANTO Y SU EFECTO EN LOS FIELES

Como a las 9 de la mañana de repente se oyó un ruido parecido al de un viento fuerte, y este sonido llenó la casa del monte Sión donde se hallaban los Apóstoles (el cenáculo de Sión donde tuvo lugar la Última Cena) y sobre cada uno de ellos descansó una dividida lengua de fuego. Las señales externas eran necesarias para los hombres de aquella época, todavía insuficientemente espirituales, para llevarlos a la fe.

Los Apóstoles sintieron una gran animación, esclarecimiento y sed de predicación de la salvadora Palabra de Dios, o sea, la Santa doctrina de nuestro Señor Jesucristo. Repentinamente obtuvieron la capacidad de expresarse en varios idiomas.

 

INMEDIATAMENTE COMENZÓ LA EVANGELIZACIÓN

Para las fiestas de Pascua y Pentecostés, en Jerusalén se reunían los hebreos procedentes de diversos países. Viviendo durante tiempo prolongado fuera de Palestina, olvidaron la lengua hebrea, de suerte que sólo hablaban los idiomas de los países donde moraban permanentemente. Por tanto fueron llamados «helenistas,» mientras que los gentiles que fueron convertidos a la fe judía se denominaban «prosélitos.» Para la fiesta de Pascua se juntaron en Jerusalén entre uno y dos millones de ellos.

Muchos de ellos sintieron el ruido y se reunieron alrededor de la casa donde se encontraban los Apóstoles. Éstos salieron y comenzaron su predicación dirigiéndose a cada uno en el idioma de su país. Algunos quedaron asombrados, mientras que otros se burlaban, diciendo: «Están embriagados del vino dulce.»

Entonces, el Apóstol Pedro, a quien acompañaban los otros once Apóstoles, pronunció palabras potentes, diciendo que ellos no estaban embriagados ya que no es más que la hora de la mañana, sino que Dios hizo cumplir la profecía del santo Profeta Joel referente al descenso del Espíritu Santo. También el Apóstol Pedro dijo acerca del Salvador, «a Quien vosotros habéis matado, pero Dios Lo ha resucitado, y Él, después de su gloriosa Ascensión, ha enviado al Espíritu Santo.»

 

LOS PRIMEROS EFECTOS DE LA GRACIA DE DIOS EN LA IGLESIA PRIMITIVA

El sermón del Apóstol Pedro estuvo impregnado con la fuerza espiritual y con el amor para con los extraviados judíos. Estos se enternecieron y preguntaban: «¿Qué tenemos que hacer?» El Apóstol contestó: «Arrepentís y recibid el bautismo para la absolución de los pecados, luego obtendréis el don del Espíritu Santo.» En aquel día fueron bautizados 3.000 hombres.

Después de Pentecostés los Apóstoles Pedro y Juan iban hacia el templo para orar. En la entrada del templo se encontraba sentado un mendigo, cojo desde su nacimiento, que no podía caminar y suplicaba por una limosna. El Apóstol Pedro le dijo: «No tengo ni plata ni oro, pero lo que tengo te doy: en nombre de Jesús Nazareno Cristo, levántate y anda.» Éste saltó y se alejó alabando a Dios.

Este milagro impresionó mucho al pueblo. Después de las palabras pronunciadas por el Apóstol Pedro se bautizaron 2.000 hombres. De esta manera, el número de los cristianos dentro de un corto lapso ascendió hasta 5.000 personas.

 

LA VIDA DE LA PRIMERA COMUNIDAD CRISTIANA

Los primitivos cristianos se reunían diariamente en el templo y escuchaban los sermones de los Apóstoles, y en los días del Señor (domingos) se juntaban en casas particulares para oficiar la Santa Eucaristía (Liturgia) y con el fin de comulgar de los Santos Cuerpo y Sangre de Cristo.

Asimismo, tenían caridad mutua, de suerte que parecía que tenían un sólo corazón y una sola alma. Muchos cristianos vendían sus haciendas, y el dinero recibido lo entregaban a los Apóstoles y a los pobres.

 

EL SUCESO DE ANANÍAS Y SAFIRA

Un hombre llamado Ananías con su esposa Safira habían vendido su hacienda y trajeron el dinero recibido a los Apóstoles, pero escondieron una parte del mismo. Lo hicieron por dos razones. Por un lado, querían glorificarse entre los cristianos como abnegados y buenos, ya que toda su posesión la dieron a los pobres, y por otro,clandestinamente querían vivir para su propio placer teniendo suficiente plata. Con el fin de cortar de raíz este espíritu nada cristiano, el Apóstol Pedro explicó que la propiedad pertenecía a Ananías y Safira, encontrándose completamente bajo su poder, pero el acto cometido fue un gran pecado. Pedro dijo: «Ananías, ¿por qué permitiste a Satanás introducir en tu corazón elpensamiento de mentir al Espíritu Santo? No mentiste a los hombres, sino a Dios.» Al instante, Ananías y luego Safira cayeron muertos.

Los Apóstoles realizaban muchos milagros, y aun la sombra del Apóstol Pedro sanaba a los enfermos. La abundancia de los dones del Espíritu Santo regocijaba a los creyentes y convertía al cristianismo a numerosos incrédulos. Sin embargo, los envidiosos jefes judíos odiaban a los Apóstoles.

 

LOS DIÁCONOS

En medio de los cristianos se encontraban los judíos de Palestina y los llegados de otros países, llamados «helenistas.» Éstos últimos murmuraban quejándose que sus viudas recibían menos subsidios durante la distribución.

Por consiguiente, los Apóstoles sugirieron que los creyentes eligiesen siete varones piadosos, sobre quienes los Apóstoles impusieron orando las manos, lo que produjo el descenso del Espíritu Santo. De esta manera apareció la sagrada dignidad de los «diáconos» (la palabra diácono significa «servidor»).

Aparte de la distribución de los subsidios, los diáconos ayudaban a los apóstoles en sus sermones y ejecución de los sacramentos.

  ¿Sabes cómo hacer el Decenario al Espíritu Santo?

Pentecostés: el nacimiento de la Iglesia

FUENTE: primeroscristianos.com 

APOYO AL CONCILIO CATÓLICO AMERICANO


Mientras se celebra en Detroit el inicio del Concilio Católico Americano, se
lanza al aire la pagina web de Somos Iglesia que quiere brindar apoyo al
Manifiesto por una reforma de la Iglesia Católica Romana elaborado y firmado por
mas de 300 teólogos y teólogas docentes universitarios (alrededor de las 3/4
partes de este cuerpo académico) de la Europa de habla alemana (y tierra natal
del actual pontifice). Mas de 65.000 personas han manifestado ya su apoyo a esta
iniciativa.

http://www.pro-memorandum-2011.org/home.es.html

Gracias por el apoyo que se le brinde a esta iniciativa y por difundirla.

Cordial saludo,
Elfriede Harth

Remitido al e-mail

SEÑORES TENEMOS QUE HABLAR: Por Javier Vitoria


No me ha resultado nada sencillo hablar de mujer e igualdad sin recurrir a los
tópicos del lenguaje política y culturalmente correcto. Lo fácil hubiera sido ofrecer
directamente las respuestas que (supongo) esperan quienes me preguntan. En este caso,
mujeres de Cáritas. Me ha parecido más honrado seguir un camino diferente.
Patriarcado y sociedad
Es una obviedad. En los últimos cuarenta años hemos dado pasos
importantísimos en dirección a la igualdad entre hombres y mujeres en la sociedad. En
este periodo de tiempo hemos avanzado mucho más que en mil años. Lo evidencia la
presencia masiva de mujeres en espacios hasta hace bien poco tiempo exclusivamente
reservados a los varones, salvo excepciones que solamente confirmaban la regla
general. Lo garantizan las legislaciones de las democracias avanzadas como la nuestra.
Y los dinamismos sociales parecen indicar el carácter irreversible del proceso.
¿Todo este avance ha servido para transformar de manera igualmente
significativa el modelo cultural de comportamiento que justificaba y legitimaba las
desigualdades entre varones y mujeres? Tengo dudas muy serias sobre la desactivación
del modelo. Evidentemente la irrupción de las mujeres en espacios anteriormente
vedados para ellas tiene de correlato la aparición de los varones en parajes inexplorados
por ellos hasta hace muy poco tiempo. Por ejemplo, el cuidado de los niños, la atención
a las tareas domésticas, etc. Pero ¿el modelo legitimador de la desigualdad no sigue hoy
“vivito y coleando”? Para dar cuenta de mi incertidumbre haré memoria de mi propio
recorrido biográfico.
Nací recién terminada la guerra civil española en el seno de una familia
burguesa. Tuve tres hermanos varones. En mi casa las mujeres eran mi madre y “las
chicas” del servicio doméstico. Todas ellas, bajo la dirección de la “señora”, se
dedicaban a tareas importantes para la vida del hogar: hacer que la casa funcionara,
alimentar a la familia, cuidar de los niños y de los adolescentes, resolver los problemas
domésticos y encargarse de cinco varones totalmente heterónomos en asuntos propios
tan elementales como lavar y planchar su ropa, poner y recoger la mesa común, hacer su
cama, etc. Las mujeres realizaban labores imprescindibles para la vida familiar, pero
subalternas. Mi padre, el varón adulto de la casa, realizaba los trabajos predominante de
la familia: ganar dinero suficiente para sacarla adelante y mantener su estatus social,
establecer las reglas de juego de la convivencia, ofrecerla protección y vincularla o no
con ámbitos de poder social, económico, político y religioso.
Creí entonces -¡ingenuo de mí!- que ser hombre dependía de lo que yo quisiera
hacer con mi vida. Mi padre que era un republicano liberal, así nos lo hizo entender a
sus cuatro hijos. Y cada uno de nosotros emprendió su propio camino a la hora de
1<
Continuar leyendo en la fuente:
http://www.donesesglesia.cat/

PENTECOSTÉS: CUMPLEAÑOS DE LA IGLESIA!!!


Homilía de Pentecostés – Ciclo A – 12 de junio 2011

Lecturas del Leccionario Común Revisado
Salmo 104:24-34, 35b
Hechos 2:1-21
1 Corintios 12:3 b-13
Juan 20:19-23
(Católica y Episcopal leccionarios son aproximadamente los mismos.)

¡Aleluya! Hoy es Pentecostés! Hoy es el cumpleaños de la Iglesia! Pero, nosotros somos la Iglesia! Este es nuestro cumpleaños! Si es nuestro cumpleaños, hoy debemos estar celebrando algo muy especial – un cierto punto de la unidad que todos – independientemente de su denominación – han. Y el punto de unidad es que todos podemos escuchar la Buena Nueva – cada uno de nosotros en nuestro propio idioma, cada uno de nosotros en nuestro propio corazón. Y podemos estar encendida por esta buena nueva!

En ese primer Pentecostés, nosotros (la Iglesia más allá del área de Jerusalén) fueron finalmente capaces de oír que Jesús había trabajado con nosotros (la iglesia local) por un buen tiempo – nos enseña, nos prepara para ser inflamado por el Espíritu. Que no entendíamos. Él nos dijo que enviaría el Espíritu que nos diría todo lo que necesitaba saber y que nos ayudaría en todo lo posible. Y en ese primer Pentecostés, el Espíritu ha hecho llegar, en lenguas de fuego, como se nos dice en Hechos. Y los que hablaron podría ser entendido por nosotros (la nueva Iglesia) en todos los idiomas imaginables!Esto fue increíble. ¿Qué es lo que escuchamos?

Con el fin de entender que, primero tenemos que volver a la historia de la Torre de Babel, Génesis 11:1-4. Utilizando frases seleccionar de esta sección, vemos que,

<<Todo el mundo habla el mismo idioma, usando las mismas palabras …. Se decían unos a otros: «Venid, vamos a moldear ladrillos y se endurecen con el fuego». … (Y) … «Venga, vamos a construir una ciudad y una torre cuya cúspide llegue al cielo, y así hacer un nombre para nosotros mismos, de lo contrario vamos a estar dispersos por toda la tierra «… Entonces el Señor dijo:».. Si ahora, mientras que un solo pueblo, todos hablan el mismo lenguaje, que han comenzado a hacer esto, nada más se les impide hacer lo que pretendo hacer. Veamos a continuación, bajar y confundamos allí su lengua, de modo que uno no va a entender lo que otro dice. » Así el Señor los dispersó de allí sobre toda la tierra, y dejaron de edificar la ciudad.>>

Es muy fácil decir que la historia de Babel es un medio excelente alegórico de explicar la diversidad de los idiomas del mundo. Y tal vez lo es. Sin embargo, parece que Babel va mucho más allá del lenguaje físico. La gente ya no  escucha de la Palabra de Dios. Ya no eran capaces de comprender al otro-y tal vez ya no es capaz de entender un solo Dios.

A pesar de que la gente ya no entiende a Dios, Dios no los del desierto. Poco después de la dispersión de las lenguas, Dios llamó a Abraham y comenzó la historia judía. Durante los siguientes 2000 años los preparativos estaban en marcha para que la gente de nuevo juntos, para celebrar el acuerdo común.Jesús se acercó y el factor de unificación se puso en marcha.Una vez más, podría ser uno y tuvimos la Buena Nueva de nuestra salvación. Y Jesús envió el Espíritu, como había prometido.

En aquel primer Pentecostés, la Torre de Babel fue revertida.La dispersión de las lenguas se invirtió y todos pueden oír y entender la Buena Nueva. El Espíritu ha venido a traer la gente de nuevo y el don de lenguas – los idiomas multitudinaria del pueblo – se convirtió en el regalo de la audición, porque todos pueden oír y entender el mensaje.

Si nos fijamos en los relatos del Evangelio principios, debemos ser sorprendido por la forma en que (la gente de aquel entonces) escuchó lo que Jesús decía y lo que Jesús había dicho! No hubo divergencia de lenguaje ahí! Algunos afirman que muchos de los números evangelio son exageraciones o simbólico de significado. Eso puede ser cierto en parte pero no es totalmente cierto! Cuando llegó el momento de ir a todas las personas, el Espíritu vino para que el mensaje podría ser escuchado en todas las lenguas y por todas las personas. Mira cómo la iglesia primitiva creció! Nosotros, que la Iglesia, el Pueblo de Dios de hace 2000 años, escuchó el mensaje – cada uno en nuestra propia lengua, tal como lo escuchamos hoy.

La pregunta entonces es, que las voces no se escuchan ahora?Y, ahora que cada uno puede escuchar las palabras que Jesús nos dio, cada uno en nuestra lengua – la Buena Nueva de nuestra salvación, ¿qué vamos a hacer con él? ¿Vamos a vivir de esa Buena Noticia que envió un mensaje de Jesús el Cristo y confirmada por el Espíritu Santo? ¿Vamos a vivir como si cada persona que conocemos es Cristo? ¿Vamos a amar como Cristo nos ha mandado a amar? ¿Vamos a seguir la declaración de Francisco de Asís, a «predicar el evangelio en todo momento. Palabras de uso si es necesario»? ¿Vamos a vivir esta fiesta de cumpleaños? ¿Vamos a vivir esta unidad que tenemos con todas las personas? ¿Vamos a vivir este entendimiento, porque sabemos lo que estamos diciendo. Se nos ha dado el don de la audiencia! Si escuchamos, podemos escuchar a nuestros hermanos y hermanas. Es en COMUNIDAD  hermanos y hermanas que oímos la continuación de la Buena Nueva. Es en comunidad hermanos y hermanas que se encendió por el Espíritu  la Buena Nueva a todos los que nos encontramos. En la comunidad de nuestros hermanos y hermanas, podemos hablar las palabras que el Espíritu enciende dentro de nosotros – y todos se entienden.

En medio de nuestra celebración de cumpleaños, en medio de nuestra alegría por nuestra unidad, en medio de nuestro entusiasmo, porque todos nosotros somos capaces de escuchar y entender la Buena Nueva, persisten algunos problemas. ¿Estamos volviendo a nuestro Babels privado y poniendo ladrillos entre Dios y el Pueblo de Dios? ¿Estamos creando las reglas como si sabemos más que Dios?¿Estamos de extinción de las lenguas de fuego que enciende nuestra unidad espiritual? ¿Estamos tan difícil para los demás del pueblo de Dios para conocer y entender la Buena Nueva de que se dan por vencidos? ¿Hemos empezado quizá la reconstrucción de la Torre de Babel? Vamos a suplicar al Espíritu que nos ayude a derribar nuestras Babels privado y para abrir nuestros oídos y nuestras palabras para que el Espíritu puede ser escuchado por nosotros y se puede hablar a través de nosotros – para que cada día es una vez más el cumpleaños de la iglesia dentro de nosotros. Después de todo, realmente somos la iglesia!

Roberta Meehan +
ARCWP
Remitido al e-mail   (Traducción Google)

Pentecostés en el Monte Athos


Viaje por la santa montaña de la Iglesia Ortodoxa. Llevado a cabo y narrado por primera vez en 1997. Y lo es ahora, este año. Porque sobre el Monte Athos los tiempos terrenales se hacen una sola cosa con el hoy eterno del cielo
por Sandro Magister

MONTE ATHOS – Se detienen los relojes, cuando de los vapores del Mar Egeo se ve aparecer de repente la cima del Monte Athos, porque allí las cosas son de otra época. El calendario es el juliano, atrasado 13 días respecto al latino que se ha impuesto en el resto del mundo. Las horas no se cuentan a partir de la medianoche, sino a partir de la puesta del sol. Y no es bajo el sol meridiano, sino en la oscuridad nocturna que el Monte Athos más vive y más palpita: de cantos, de luz y de misterios.

El Monte Athos es realmente una tierra santa que infunde temor de Dios. No es para todos. Por el momento no es para las mujeres, que ya son una buena mitad de los humanos. La última peregrina autorizada puso sus pies allí dieciséis siglos atrás. Se llamaba Galla Placidia, la de los mosaicos azul y oro de una iglesia de Ravena dedicada a ella. De nada le valió ser hija del gran Teodosio, emperador cristiano de Roma y Constantinopla. En la entrada de un monasterio del Athos, un ícono de la Virgen le ordenó: ¡Detente!, y le exigió abandonar la montaña. Dicen que desde el siglo XI ni siquiera los animales hembras – vacas, cabras, conejas – se atreven a subir impunemente al monte santo.

URANÚPOLIS

Uranúpolis, ciudad del cielo, último pueblo griego antes del sagrado confín, es un puesto de frontera muy especial. Carteles de hierro esmaltados advierten hasta el final que simplemente no la pasaréis bien si sois una mujer vestida de hombre o si os descubren sin los justos permisos. La sagrada epistassía, el gobierno de los monjes, os entregará a un tribunal de Grecia, el cual es siempre severo en la tutela de la extraterritorialidad del Monte Athos y de sus leyes de teocracia autónoma, sancionadas en la constitución helénica y de fuerte reconocimiento internacional.

Monjes sudados, con hábito y un gorro redondo mantienen a raya la muchedumbre de viajeros en busca de un pase. Muchos son los llamados pero pocos son los elegidos, dice el Evangelio. Y poquísimos son las autorizaciones de ingreso timbradas cada mañana con el sello de la Virgen. Aquél que recibe finalmente el símil de pergamino que autoriza la visita corre al muelle de embarque. Porque al Monte Athos se entra solamente por mar, en embarcaciones que tienen nombre de santos.

El lugar de desembarco es un pequeño puerto, situado en la mitad de la península, que se llama Dafne, como la ninfa de Apolo. Pero olvida al lejano Olimpo, que desde allí se vislumbra en las jornadas ventosas. Un viejo autobús panzudo, de color tierra también en las ventanillas, avanza con dificultad por la subida hasta Kariès, ombligo administrativo del Monte Athos, sede de la sagrada epistassía.

KARIÈS

En Kariès está la gendarmería, hay un par de callejones con tiendas que venden semillas de farro, íconos, granos de incienso y hábitos monacales; está la terminal de autobús y además una cantina. Hay también un teléfono público, que da toda la impresión de ser el primero y el último.

Kariès es un extraño y pequeño pueblo sin habitantes. Los pocos que acompañan son todos provisorios: monjes itinerantes, gendarmes, obreros jornaleros, viajeros perdidos. De allí en adelante se sigue a pie, horas de marcha sobre calles excavadas, sin sombra alguna, bajo nubes de polvo impalpable como cacao. O bien en camionetas alquiladas por uno de los extraños griegos provisorios. O bien saltando sobre el jeep de paseo, propiedad de los monasterios más modernizados.

Pero siempre con un gran suplicio para el cuerpo. El Monte Athos es para personas de carácter fuerte, para ascetas. De repente impresiona. Cada día de visita tendrá su via crucis de polvo, piedras y precipicios, porque en vuestro precioso permiso está escrito que no podéis permanecer más de una noche en un monasterio, y entre uno y otro hay horas de camino: es obligatorio peregrinar.

EL GRAN LAURA

Pero cuando arribáis exhaustos a uno de los veinte grandes monasterios… ¡qué paraíso! El Gran Laura, el primero de los veinte en cuanto a jerarquía, os acoge dentro de sus muros, suspendidos entre la tierra y el cielo, orientado hacia la punta de la península, justamente bajo la santa montaña. Se presenta un joven monje y os retira el pergamino y el pasaporte. Vuelve a presentarse como el ángel del Apocalipsis, después de un silencio en el cielo de casi media hora, ayudándoos a reponeros con un vaso de agua fresca, una copita de licor de anís, un terrón de gelatina de fruta y un café a la turca, con especias. Es el signo que habéis sido admitidos entre los huéspedes. Os toca un lecho, en un cuarto para seis personas, entre muros viejos de varios siglos, con las sábanas frescas agujereadas y una toalla. Desde ese momento haréis vida de monje.

O bien haréis lo que os parece. Los monasterios del Monte Athos no son como los de Occidente, ciudadelas amuralladas donde cada movimiento, cada palabra son bajo una regla colectiva. En el Athos hay de todo y para todos. Está el eremita solitario en el acantilado de roca, al que le mandan el pan de tanto en tanto con una cesta. Están los anacoretas en sus cuchitriles, apartados entre retamas y madroños, en la ladera de la montaña. Están los que no tienen una morada fija, siempre en camino y siempre inquietos. Están los solemnes cenobios de vida común, dirigidos por un abad, a quien se lo llama higúmeno. Están los monasterios pueblerinos, donde cada monje hace lo que hace a su ritmo.

El Gran Laura es uno de éstos. Dentro de sus muros hay plazas, caminitos, iglesias, pérgolas, fuentes, molinos. Las celdas forman un bloque, como en una kasbah oriental. Resaltan los tonos azules, mientras el rojo es el color sagrado de las iglesias. Cuando suena el llamado a la oración, con campanas de siete sonidos y con el martillar de las maderas, los monjes se dirigen al katholikón, la iglesia central. Pero si alguno quiere rezar o comer en soledad, nada le impide permanecer en su celda. También es así para el visitante, salvo que él tiene justamente pocas alternativas. A las vísperas acude impaciente. En la oración nocturna se prueba, rápidamente inducido a replegarse por el sueño. En la liturgia matinal se vuelve a poner a prueba, vagamente aturdido.

¿O embriagado? En el Gran Laura hay perfume de Oriente, de Bizancio. Hay aroma de ciprés y de incienso, fragancia de cera de abejas, de reliquias, de antigüedades misteriosamente próximas. Porque los monjes del Monte Athos no sufren el paso del tiempo. Os hablan de sus santos, de ese san Atanasio que plantó los dos cipreses en el centro del Laura, que construyó con fuerza hercúlea el katholikón, que modeló el monacato atonita, como si no hubiese muerto en el año 1000 sino apenas ayer, como si se lo hubiese encontrado personalmente y hace poco.

Santos, siglos, imperios, ciudades terrenales y celestiales, todo parece oscilar y fluir sin distancia alguna. A los visitantes se les ofrece que veneren, en el centro de la nave de la iglesia, los tesoros del monasterio: cofres de oro y plata con zafiros y rubíes, que engalanan la cintura de la Virgen, el cráneo de san Basilio Magno, la mano derecha de san Juan Crisóstomo. La luz del atardecer los enciende, los hace vibrar. Se encienden también los frescos de Teófano, maestro de la escuela cretense de los comienzos del siglo XVI; las mayólicas azules en las paredes, las madreperlas del iconostasio, del atril, de la cátedra.

Luego de las Vísperas se sale en procesión del katholikón y se ingresa, frente a la plaza, en el refectorio, que tiene también la arquitectura de una iglesia y que también está lleno de pinturas al fresco, hechas por el gran Teófano. Continúa la misma liturgia. El higúmeno ocupa un lugar en el centro del ábside. Casi cantando, un monje lee desde el púlpito historias de santos. Se come pan bendecido, sopas y hortalizas en viejas vajillas de hierro, en las fiestas se bebe vino color ámbar, sobre gruesas mesas de mármol talladas en forma alargada, a su vez apoyadas sobre soportes de mármol milenariamente viejos, pero que evocan los dólmenes de la prehistoria. También la salida se efectúa en procesión. Un monje ofrece a cada uno del pan santificado. Otro lo inciensa con tal arte, que también os queda el perfume en la boca durante un largo rato.

VATOPÉDI

Luego del Gran Laura, en la jerarquía de los veinte monasterios, está el Vatopédi. Surge sobre el mar, entre dulces colinas vagamente toscanas. Cuentan que allí se salvó el náufrago Arcadio, hijo de Teodosio. Y allí debió hacerse a la mar la hermana, Galla Placidia, la primera de las mujeres proscriptas del Monte Athos.

Así como el Laura es rústico, el Vatopédi es refinado. Y lo fue en demasía, en algún momento de su historia pasada: opulento y decadente. Hasta no hace muchos años albergaba monjes sodomitas, que deshonraron al Monte Athos. Pero luego se ha hecho presente el látigo purificador de un ramillete de monjes rigoristas llegados de Chipre, quienes alejaron a los réprobos e impusieron la regla cenobítica. Hoy Vatopédi se ha convertido en un monasterio de los más florecientes. Recibe jóvenes novicios desde la lejana América, hijos de emigrados ortodoxos.

Vatopédi es la aristocracia del Monte Athos. Dice solemnemente el higúmeno Efrén, de barba color cobre, ojos claros y voz melodiosa: «El Athos es único. Es el único Estado monástico en el mundo». Pero si es una ciudad del cielo sobre la tierra, entonces allí todo debe ser sublime. Como las liturgias, en el sublime Vatopédi lo son realmente, especialmente en las grandes fiestas de Pascua, Epifanía, Pentecostés. El peregrino vence el sueño y no pierde, por nada del mundo, sus maravillosos oficios nocturnos.

Ya la iglesia es de una gran fascinación: tiene forma de una cruz griega, como todas las iglesias del Monte Athos, admirablemente pintada con frescos por los maestros macedonios del siglo XIV, con un iconostasio refulgente de oros y de íconos. Pero el canto es lo que da vida a todo: canto con muchas voces, varonil, sin instrumentos, que fluye ininterrumpidamente también durante siete o diez horas de corrido, porque cuanto más grande es la fiesta tanto más se prolonga en la noche, canto o bien robusto o bien susurrado, como una marea que crece y se retrae.

Los coros-guías son dos: racimos de monjes reunidos en torno al atril, encolumnados en el respectivo transepto, con el maestro cantor que entona la estrofa y el coro que toma el motiva y lo hace florecer en melodías y en acordes. Y cuando el maestro cantor se desplaza del primer al segundo coro y atraviesa la nave a pasos veloces, su ligera capa con dobleces minúsculos se infla hasta formar dos alas majestuosas. Parece que volara, como las notas.

Y luego las luces. Hay electricidad en el monasterio, pero no en la iglesia. Aquí las luces son únicamente las que provienen del fuego: miles de pequeños cirios, cuyo elevarse, decrecer y moverse es también parte del rito. En cada katholikón del Monte Athos pende de la cúpula central, sostenido por largas cadenas, una lámpara de techo con forma de corona real, con una circunferencia parecida a la cúpula misma. La corona es de cobre, de bronce, de latón centelleante, alterna cirios e íconos, cuenta con huevos gigantes colgantes, los que simbolizan la resurrección. Desciende muy abajo, hasta casi ser rozado, justamente delante del iconostasio que delimita el sancta sanctorum. Otras fastuosas y doradas lámparas de techo descienden de las bóvedas de los transeptos.

Ahora bien, en las liturgias solemnes existe el momento en el que todas las luces se encienden: las de las lámparas de techo y las de la corona central. Luego se hacen oscilar las primeras, mientras se hace rotar la gran corona en torno a su eje. La danza de luces dura por lo menos una hora, antes que se aplaque lentamente. El palpitar de las miles de llamitas, el brillar de los oros, el tintineo de los metales, el cambio de colores de los íconos, la onda sonora del coro que acompaña estas galaxias de estrellas rodantes como esferas celestes: todo hace relampaguear la verdadera esencia del Monte Athos, su asomarse a los misterios supra-humanos.

¿Cuáles liturgias occidentales, católicas, son hoy capaces de iniciar en misterios similares y de inflamar los corazones simples con cosas celestiales? Joseph Ratzinger, ayer como cardenal y hoy como Papa, da en la tecla cuando diagnostica que el punto crítico del catolicismo actual se encuentra en la vulgarización de la liturgia. En el Monte Athos, el diagnóstico es inclusive más radical: a fuerza de humanizar a Dios, las Iglesias de Occidente lo hacen desaparecer. “El nuestro no es el Dios del escolasticismo occidental», sentencia Gheorghios, higúmeno del monasterio atonita de Grigoríu. “No puede haber interés en que exista o no un Dios que no deifica al hombre. Gran parte de las razones de la oleada de ateismo en Occidente se debe a este cristianismo funcional y accesorio”.

Le hace eco Vassilios, higúmeno del otro monasterio de Ivíron: «En Occidente manda la acción, nos preguntan cómo podemos permanecer tantas horas en la iglesia sin hacer nada. Yo respondo: ¿qué hace el embrión en el útero materno? Nada, pero dado que está en el vientre de su madre se desarrolla y crece. Así es el monje. Custodia el espacio santo en el que se encuentra y está custodiado, plasmado por este mismo espacio. Aquí está el milagro: estamos entrando en el paraíso, aquí y ahora. Estamos en el corazón de la comunidad de los santos».

SIMONOS PETRA

Simonos Petra es otro monasterio que está a la cabeza del renacimiento atonita. Se yergue sobre un espolón rocoso, entre la cumbre del Monte y el mar, con las terrazas cayendo a vértigo sobre el precipicio. Eliseo, el higúmeno, ha llegado recién de un viaje en el que recorrió los monasterios de Francia. Aprecia Solesmes, baluarte del canto gregoriano. Pero juzga a la Iglesia occidental demasiado “prisionera de un sistema”, demasiado “institucional”.

Por el contrario, el Monte Athos – dice él – es espacio de los espíritus libres, de los grandes carismáticos. En el Athos “el logos se desposa con la praxis”, la palabra con los hechos. “El monje debe mostrar que las verdades son realidades. Debe vivir el Evangelio en forma perfecta. Es por eso que la presencia del monje es tan esencial para el mundo. San Juan Clímaco afirmaba: luz para los monjes son los ángeles, luz para los hombres son los monjes».

Simonos Petra hace escuela, también fuera de los confines del Athos. Ha dado vida a un monasterio para monjas, unas ochenta, en el corazón de la península Calcídica. Ha hecho surgir otro, próximo al límite entre Grecia y Bulgaria. Ha abierto otros tres núcleos monásticos inclusive en Francia. Es un monasterio culto, dotado de una rica biblioteca. En lo más profundo de la noche, antes de la liturgia antelucana, sus ochenta monjes velan en la celda, desde las tres hasta las cinco, leyendo y meditando los libros de los Padres.

Monte Athos insomne. Sin tiempo que no sea el de las esferas angelicales. Dejarlo es una dura sacudida, inclusive para el visitante más desencantado. Se retorna a Dafne en el trasbordador. El ronquido cadencioso de los motores compite con los relojes mundanos. La muchacha griega, la primera que os sirve el café en Uranópolis, sale al encuentro como una aparición, con la fulgurante belleza de una Niké de Samotracia.

__________

En la ilustración bajo el título, un detalle de la «Maestà» de Duccio da Buoninsegna, 1308-11, Siena, Opera del Duomo.

__________
Traducción en español de Juan Diego Muro, Lima, Perú.

http://chiesa.espresso.repubblica.it/articolo/1337041?sp=y

Anteriores Entradas antiguas

A %d blogueros les gusta esto: