Gobierno suspende proyecto hidroeléctrico y acepta evaluar impacto ambiental. |
Luego de las protestas de febrero, grupos indígenas y representantes del gobierno panameño llegaron a un acuerdo el 6 de marzo para suspender temporalmente un controvertido proyecto hidroeléctrico que se tiene previsto construir en la Comarca Ngöbe-Buglé, territorio nativo semiautónomo en el occidente del país.
En las negociaciones, en las que representantes de las Naciones Unidas y de la Iglesia Católica actuaron como mediadores, el gobierno aceptó suspender el proyecto Barro Blanco, a cargo de la empresa Generadora del Istmo, hasta que concluya una evaluación de su impacto ambiental y que todos los proyectos futuros sean aprobados por el Congreso General Ngöbe-Buglé.
Un comunicado, Mons. José Luis Lacunza, obispo de la diócesis de David, señaló que el acuerdo reconoce el derecho de los ngöbe-buglé al uso y manejo de los recursos naturales en su comarca.
Pero no todas las demandas planteadas en las protestas, que dejaron dos personas muertas en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, tales como prohibir completamente los proyectos mineros en su territorio, su principal reclamo, han sido aceptadas.
Las negociaciones se reanudarán el 12 de marzo tras las celebraciones por el 15° aniversario de la creación de la comarca Ngöbe-Buglé. —Noticias Aliadas.