El Departamento de Justicia de EE.UU. anunció que los agentes fronterizos no serán enjuiciados por su participación en el asesinato de un inmigrante mexicano cerca de San Diego, aun cuando en un video de testigos oculares se ve cómo golpean y atacan al inmigrante con la taser. El hecho ocurrió en mayo de 2010 cuando Anastasio Hernández-Rojas de 32 años de edad fue capturado mientras trataba de ingresar a Estados Unidos desde México. Anteriormente había vivido en Estados Unidos durante 25 años y fue padre de cinco niños nacidos en dicho país. La oficina de medicina forense de San Diego catalogó la muerte de Anastasio Hernández-Rojas como homicidio y llegó a la conclusión de que sufrió un ataque cardíaco y que tenía «hematomas en el tórax, estómago, caderas, rodillas, espalda, labios, cabeza y párpados, cinco costillas rotas y la columna dañada». Los agentes afirman que se enfrentaron a Hernández-Rojas porque se puso hostil y se resistió a la detención. Nos acompaña Andrea Guerrero, cotitular de la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur de EE.UU. y directora ejecutiva de la organización Alliance San Diego.
http://www.democracynow.org/es/2015/11/9/a_devastating_decision_no_charges_for